Todo estaba preparado para recibir el primer partido de la Copa África. Los ruidosos aficionados – que en ningún momento han dejado de animar- abarrotaban el estadio de Accra, con capacidad para 35.000 personas. En el terreno de juego se iban a enfrentar los anfitriones, vestidos de blanco, contra los Syli, que lucían una camiseta roja y un pantalón amarillo. El colorido balón (amarillo, verde y rojo) echó a rodar en lo que, a priori, sería una fácil victoria local.

Los postes de la portería cobraron protagoniso en la primera mitad y fueron los culpables de que el primer gol del campeonato se hiziera esperar; en concreto, hasta el minuto 55 cuando Gyan Asamoah, delantero del Udinense italiano, tuvo el privilegio de lanzar la primera pena máxima. 1-0 para Ghana. La respuesta no tardó en llegar. Kalabane, defensa del Manisaspor de Turquía, fue el héroe y villano de la selección de Guinea. Diez minutos después de cometer el penalti que supuso el gol ghanés puso las tablas en el marcador. Los nervios invadían al conjunto liderado por Essien, centrocampista del Chelsea, ya que el tiempo pasaba y las estrellas negras no eran capaz
de perforar la portería rival, perdonando ocasiones claras, mientras que los guineanos solo llevaban peligro en sus escasos contraataques. Entonces apareció Muntari, cuando los guineanos ya celebraban el punto conseguido, para salvar a su selección y hacer enloquecer a la afición local. Su disparo con la zurda, desde fuera del área, se coló como un obús por la escuadra de la meta guineana haciendo inútil la estirada del portero Kemoto Camara. Corría el minuto 90 y el primer partido del Grupo A ya tenía vencedor.

Los anfitriones responden a su condición de favoritos, avalada por su buena actuación en el Mundial de Alemania 2006, aunque hoy han tenido que sudar tinta para sumar los tres puntos y poner la primera piedra en lo que puede ser su quinta victoria en esta competición desde que en 1982 consiguieran su último triunfo.

El lunes 21 a las 16.00 se jugará el otro partido del grupo A entre Namibia y Marruecos. Los leones del Atlas no deberían tener problemas para vencer a los guerreros de Namibia.
Este mismo día también se enfrentarán los contendientes del grupo B, Nigeria-Costa de Marfil y Malí-Benin